La crispación en el mundo de la Enseñanza afecta a todos los sectores (estudiantes, padres, docentes) y a todas las edades. A punto de terminar el curso académico las huelgas, manifestaciones y movilizaciones se repiten contra el ministro Wert. Su Ley Orgánica de Mejora de la Calidad de la Enseñanza, si nadie lo remedia, entrará en vigor en los próximos meses con todo el mundo, excepto el PP, en contra. Las políticas de recortes afectan desde la Primaria a la Universidad, cae la calidad y caen los medios, la motivación de estudiantes y profesores y la valoración de una Educación Pública que era de calidad.
A estas alturas miles de estudiantes todavía no han recibido la beca prometida para este año por el ministro y pueden perder el curso por no poder pagar unas tasas ahora prohibitivas. Y lo peor se ha visto en los encierros y protestas de estos últimos días, con más de 50 manifestaciones en todo el país y con una represión estudiantil que no se veía en décadas.
El informe Pisa
La actualidad en materia educativa está marcada por el informe PISA, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos que concluye que los alumnos españoles están a la cola en la resolución de problemas cotidianos. Tohil Delgado acusa directamente al Ministerio de Educación de tener la "máxima responsabilidad en esos datos negativos" ya que "en dos años que lleva en el Gobierno el PP solo se ha preocupado en recortar, han acabado con aulas de enlace y los servicios de apoyo y después se preguntan ¿Por qué?"
Isabel Galvín pone en contexto los resultados del informe PISA y defiende también que "la responsabilidad de estos resultados los tiene el Gobierno, que no ha hecho más que recortar, que ha despedido a decenas de miles de profesores. Ha hecho que las aulas estén masificadas y es imposible trabajar con los rangos que recomienda PISA, modelos cercanos individualizados y con ratios cortos. En este contexto resulta absolutamente imposible avanzar en la mejora de las competencias del alumnado español que no es otra cosa que el futuro de los ciudadanos".
Las Mareas Verdes
Galvín describe las protestas por la Educación como "la madre de las Mareas en España. Empezamos la Marea Verde como alianza de alumnado, profesorado y las familias y reiteramos como estamos comprometidos porque la Escuela Pública es la única que garantiza que la hija o el hijo del obrero puedan llegar a la Universidad. Ha habido muchos recortes, ha habido muchos, muchos despidos, recortes en condiciones y precarización total. Pero el compromiso se mantiene y los tres se apoyan, padres, alumnos, profesores, y luchan por la Escuela Pública. Este es el ejemplo de que la Comunidad Educativa tenemos que seguir. Por eso planteamos a nuestros profesores y padres que unidos tenemos fuerza y somos
imparables y por eso les llamamos a una nueva Huelga para seguir defendiendo la Educación Pública".
La defensa de lo público es una lucha constante desde el Sindicato de Estudiantes, y Tohil Delgado mantiene que hay que seguir "luchando porque hay mucho que ganar y podemos vencer. Estamos viendo ejemplos que nos ilusionan, como el de la Marea Blanca, que venció la privatización de los hospitales públicos, la lucha de los barrenderos que hicieron dar marcha atrás al Ayuntamiento de Botella o como los vecinos obreros del barrio el Gamonal que pacíficamente lograron paralizar unas obras amañadas que no les beneficiaban".
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